OPERACIÓN SANTA PATRICIA 4.0, AL BORDE DE LA CORNISA (554ª PARTE): EL GRAN POLVORÍN EN DERECHOLANDIA (7).

 Con “Chamuyero” de los bifechorizos de Organización X, vamos a contar toda la papa de la Toma de Derecholandia y la funa que le hicieron al maricón de mierda de Davor Harasiç en el Edificio Almanara, al más puro estilo de la Operación Santa Patricia, la única que hace tres años logró mandar a la mierda al Turco Nahum desde Pío Nono para que no vuelva nunca más.

  La vida diaria de los tomistas en la Mole de Pío Ñoño, parte a las siete de la madrugada cuando se preparan las comisiones de seguridad, finanzas, cocina, aseo y comunicaciones, mientras los otros mortales aún no se despegan del saco de dormir y de la zafrada en las salas calefaccionadas. Después que se juntan los mateítos con los funcionariosaurios, comienza el desayuno desde el Casino, para luego seguir con un sinfín de actividades comunitarias. Al mediodía, se vienen las incombustibles asambleas de Escuela, las que continúan con la hora del manyete en el patio, las actividades de extensión, las marchas, las funas e incluso, las votaciones para revalidar una Toma o bajarla (en este caso, ha habido dos votaciones de revalidación, con un quórum superior a los 1.000 torombolos y, con porcentajes de aprobación aplastantes.). Ya avanzada la tarde y, acercándose a la noche, la hora de tu papa –como diría Willy Sabor-, las Asambleas de Toma en el Aula Magna, las distracciones noctámbulas en el frontis…, y al final, con toda la Mole y Santa María cerrados, todos los mateítos se van a la durma. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así…

 “¡Y FIESTA Y FIESTA…, QUE SIGA LA FIESTA… ¡VAMO’ A DARLE FIESTA A ESTA GENTE, HASTA QUE AMANEZCA…!!”.

  Lo que pasó la mañana del lunes 23 de Octubre Purkuyén en el Edificio Almanara, fue sin lugar a dudas una de las grandes batallas que libraban la masa oprimida y los davoristas de mierda, ya que estos últimos se arrancaron de la Mole tras la Toma, con el julepe a que fueran encarados por mateítos y funcionariosaurios. ¿Por qué?. Porque estos mequetrefes impusieron de manera unilateral un arsenal de medidas que, como ya dijimos en capítulos anteriores de esta Operación Santa Patricia, afectaban de manera grotesca la convivencia universitaria.

  Con lienzos llegaron los cabros al inmueble ubicado en Santa María frente al Puente Peatonal Condell, para llegar a sacarse selfies y grabar los acontecimientos previos al mentado Consejo de Facultad, con cánticos tales como “No queremos ni uno más, ni un Consejo sin votar”, “¿Y dónde están…, y dónde están?... Harasiç da cara y sale a dialogar”, “Que venga, que venga, que venga el Decano. Aquí no le tenemos miedo a los sumarios”, entre otros. De hecho, el boliviano de nacimiento entró al edificio ocupado por las Clínicas Jurídicas, tratando de hacerle el quite a una masa hambrienta de justicia para funarlo en el mismo acto.

  Ya con la masa que se multiplicó por montones, entraron nomás al edificio para tapizar a gritos a los integrantes de ese nefasto Consejo de Facultad, para luego escuchar las estúpidas argumentaciones de los fachos de mierda que lo dirigían, entre ellos, Rodrigo Valenzuela Cori –el Llorón del Open Door-, que abrió la tarasca para alegar que, con la Mole tomada no iban a dialogar, cosa que molestó a los presentes que se las emprendieron contra ese pelafustán. Tras las primeras escaramuzas donde los profes mala clase se querían cuadrar con el cabeza de rodilla, lo que posibilitaría la funa estudiantil, no llegaron a un acuerdo, ya que dos votos debilitaron la postura de los recalcitrantes, los de Eric Palma y Jaime Labra, que con ello, dejaron en claro que los lloriqueos de los que se escondían en las faldas del estúpido de Harasiç, no iban a servir de mucho. Y no sirvieron las actitudes arrogantes de los ocho mal nacidos que no quieren dialogar, porque la masa simplemente se enyegüeció con tutti, les gritonearon a tambor batiente, el Consejo de Facultad se fue a la mierda y un leguleyo que se topó con Harasiç le gritó fuerte en la cara: “¡¡Ahora anda a defender a Anglo American conchetumadre…!!”. Así de fino el compadre para tratar de la peor manera a ese pobre animal con cara de tragedia, que desde ese instante no puede ni siquiera dormir tranquilo. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así…

 “¡ADIOS, ADIOS, ADIOS QUE TE VAYA BIEN, MY LOVE, MY LOVE. ¡QUE TE AGARRE UN CARRO, QUE TE PARTA UN RAYO Y QUE TE PISE UN TREN…!!”.