OPERACIÓN SANTA PATRICIA 4.0, AL BORDE DE LA CORNISA (551ª PARTE): EL GRAN POLVORÍN EN DERECHOLANDIA (4).

 Con la canción “Paga la cuenta sinvergüenza” de los Kumbia Hits, vamos a seguir subiendo, bajando y haciendo mierda a los causantes de la crisis que tiene a Derecholandia convertida en un polvorín y, principalmente a Davor Harasiç, al estilo de la Operación Santa Patricia, el terror de los poderosos.

  Cuando los mateítos fueron a dejar el petitorio al edificio donde el susodicho trabaja con su grupete de amigotes vinculados a Penta y a Anglo American, los amigos con ventaja de Davor Harasiç –incluido su hijo Iván-, andaban jugando a las escondidas cuando los leguleyos empezaron con el griterío que los dejó con sordera. Cuando se entregó el petitorio al cabeza de rodilla, el grupete gritaba ¡¡¿Y dónde está?, ¿y dónde está?. Harasiç da cara y sale a dialogar!”, sumado a otro que reza: “¡Decano tirano, devuelve los diez palos!”, más otro que dice: “¡Es Davor, es él quien roba el arancel…!!”, en conjunto con otro que dice: “¡¡A ver a ver…, quién lleva la batuta… ¿Los estudiantes…, o la Penta-patrulla…?!!”. Y es más, después del petitorio, los cabros se fueron tranquilitos a la Mole con todos los lienzos y los cánticos. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así…

 “¡LO QUE GUARDO ES UN MONO COGOTERO, UNA VACA Y UN TERNERO Y UN TORO MARICÓN…!!”.

  En la jornada donde por segunda vez se revalida la Toma –la que tuvo el porcentaje más aplastante de ratificación con un 92,72%-, la marcha de los mateítos y los funcionariosaurios hasta la Casandra Central, no estuvo exenta de dificultades con los carabipacos en la primera parte del trayecto. ¿Por qué?. Porque el estúpido de Davor Harasiç mandó al corrupto del Bruno Villalobos vía telefónica a reprimir la marcha, hecho que resulta deleznable y dictatorial por decirlo menos. Tanto el boliviano de nacimiento como el mandamás de los polis, se coludieron y se concertaron para repartirse el botin por cada leguleyo machucado o detenido, toda vez que varios mozalbetes quedaron como membrillo colegial por culpa de estos malditos y, hubieron tres detenidos, los cuales fueron sacados altiro después que un abogado hizo mierda a un paco diciéndole que él era un vendido de mierda que le andaba vendiendo pizzas a Harasiç y que era un engendro del mal nacido de Pinochet. El paco que dirigió la carnicería en la Alameda, fue llamado a terreno y castigado en el calabozo por maricón, con una altísima posibilidad de ser dado de baja y salir en zunga de la institución…, mientras que Harasiç y sus patanes que andaban celebrando, a las cuatro horas después se enteraron que por una paliza histórica la Toma se ratificó, con lo que estos mercenarios coludidos con Penta se fueron a llorar al Passapoga donde ninguna puta salió para consolarlos. ¡Toma cachito’e goma!. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así…

 “¡NADIE TE QUIERE, TODOS TE ODIAN, MEJOR COMETE UN GUSANITO…!!”.

  Mientras la Mole de Pío Nono y el Edificio Santa María siguen tomados, las cosas en la Ex Clínica Jurídica y en el Edificio Almanara están pasando de gris a oscuro, ya que el tema de tomarse el primero de los edificios mencionados, terminó por diluirse en una asamblea de toma, por el tema de los gradistas.

  En el Edificio Almanara, la Nora Weón Sale se fue a esconder debajo de la mesa porque ningún pelagato se fue a armar su tesis para empezar a litigar y, tanto los leguleyos como los reyes de la chupeta ni siquiera se aparecían para contar la pulenta. Pero donde sí quedó la tendalá, fue en la Ex Clínica Jurídica, porque el personal de la Secretaría de Estudios andaba más aburrido que vocal de mesa cuando los votantes no llegan; todo porque a los funcionariosaurios les empezaba a correr el julepe, a los gradistas les entró la cuatiquera y, ningún chiquillo pasa por esos pagos. Es más, los reyes de la chupeta se retiraron tempranito a sus palacetes, ya que nadie se les asomaba y, como la Mole está en Toma y el Casino no está funcionando, no tienen cocina ni microondas para calentarse lo que iban a comer. ¡Qué espanto!. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así…

 “¡LO QUE GUARDO ES UN MONO COGOTERO, UNA VACA Y UN TERNERO Y UN TORO MARICÓN…!!”.