INFIERNO EN LA TORRE 5: LA TRAGEDIA EN LA CÁRCEL DE SAN MIGUEL (PARTE 2).

La tarea de identificar los cuerpos calcinados de los 81 compadrurris que cayeron preciosos en la Cárcel de San Miguel, demoraría días, semanas o algunos meses, dependiendo eso sí de las pruebas de ADN que se hagan en el Servicio Médico Legal, Este mediodí partieron identificando a 15 reos muertos; a las cuatro de la tarde ya tenían identificados a 26; y ya a las 19 horas, la cifra se elevaba a 31, faltando 50 reos por identificar.
Cache que la situación carcelaria en Chile, no da para más. De hecho, el hacinamiento en la cana de Lo Vial, llegaba al 90%, producto de la sobrepoblación de reos, de la estrechez de los módulos -que en esa cárcel se dividen en Torres-, de la escasez de baños, la gestión como la callampa de los cara de palta dentro del penal, el constante peligro de amotinamiento entre los internos..., y por sobre todo, las constantes violaciones y atropellos a los Derechos Humanos de quienes deben pagar ante la justicia, las cuentas que tenían con la sociedad.
Como a mí no me entran balas, hay que entrar a despotricar a los gendarmes que estaban en el momento mismo de la violenta y ardiente zalagarda, así como después de ésta:
Primero, habían 32 gendarmes en el penal de San Francisco con Ureta Cox, de los cuales, 26 estaban en el perímetro haciéndose los giles, mientras los otros 6 estaban de vigilantes esa madrugada, tratando de contener a 1.924 presos. Realmente, impresentable.
Segundo, los mismos gendarmes se dedicaron tanto a impedir la labor bomberil -controlar el incendio que en tres minutos consumió el cuarto piso de la Torre 5 y, rescatar a los reclusos-, como a humillar a los reos que son rescatados con quemaduras hasta en tercer grado. Demás está decir, que estos mequetrefes sin estudios de Derecho, humillaban también a los familiares que se encontraban en plena calle San Francisco, con resultado de ataques de angustia y depresión bipolar. En tanto que los reos torturados por los gendarmes, presentaron lesiones de consideración producto de los violentos fierrazos que recibieron en pleno rescate, torturas psicológicas y otros actos crueles, inhumanos y degradantes, condenados por las Naciones Unidas.
Tercero, los mismos gendarmes que estaban en el perímetro, sacaban fotos de forma despectiva, así como pasó hace tres años en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile con Roberto Nahum. De hecho, los reos fueron asimismo amenazados con ser encerrados en celdas de 3x3 por abrir el tarro ante la prensa. Impresentable.
Cuarto, la demora en la información, terminó por enyegüecer a los familiares que se agarraron con todo para poder saber si sus familiares estaban entre los finados.
Quinto, las versiones que involucraban a gendarmes cufifos que andaban pasados a copete, vienen de versiones emanadas de los reos que estaban con celulítico en mano. De ser así, y atendiendo las cuatro circunstancias anteriores, se les va a venir un sumario de aquellos, donde los 32 cara de paltas se van a zampar una feroz PLR con Pingüi-Dania incluída, que no es otra que verlos sin pega, sin plata, sin derechos de ninguna especie, y hasta sin nacionalidad ni ciudadanía. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así...

"¡¡NADIE TE QUIERE, TODOS TE ODIAN. MEJOR COMETE UN GUSANITO...!!".