AUGUSTO JOSÉ RAMÓN, ENTRE LA ESPADA Y EL PIJAMA DE MADERA.

En el mes de Noviembre a Todo Cachete del año 1915, ocurre que Avelina Ugarte ya tenía un guaguamático calificado en una vieja posta de Pancho, y dió a luz a un pejerrey que lo bautizó como Augusto José Ramón Pinochet Ugarte, el cual será parte de la vida perra de los chilenos con toas sus artimañas y atrocidades. El niño era inteligente en su etapa escolar, llegó a estudiar pa' leguleque en la Chile, pero no le dio la cabezota, ya que quiso abrazar la vida milica por muchos años, estando de reservista cuando mandaron a los rabanitos a secarse en la pampa en 1948, producto de que Don Gabo les aforró la llamada Ley de Defensa Permanente de la Democracia (Ley Maldita).
Después de que sucedió eso en el norte, se comenzaba a destapar la olla, cuando Augusto José Ramón tenía ganas de empezar a comerse vivos a los comunistóides, mientras se casa con Lucía Hiriart Rodríguez y tiene cinco hijos a saber: Jacqueline, Augusto, Lucía, Marco Antonio y Verónica. En el Ejército, su vida pasaba de ser dragoneante, cabo alumno, clase, suboficial, brigadier, teniente, General, Capitán General y por último, Comandante en Jefe, cargo que ocupó entre 1973 y 1998.
Pero Augusto José Ramón entró a la arena política, cuando Chilito lindo era una hoguera, Salvador Allende dejaba la mansaca, el mercado negro hacía nata y los acaparadores dejaban a los más pobletes sin nada que comer. Lo que ocurre aquí, es que fue Salvador Allende quien lo designó en la Comandancia en Jefe el 23 de Agosto Monumental de 1973, a petición de Carlos Prats..., pero legó el 11 de Septiembre Monumental de 1973, se juntó con Merino, Leigh y Mendoza para que, desde sus cuarteles salieran a emitir el primer bando, preparar la batalla aérea y terrestre y derrocar al "mayoneso" (el Pato Carvajal coordinó el golpe), el cual se mató con un AKA-47 que le regaló su cumpa Fidel Castro. La resistencia de Allende fue para sus partidarios, heróica, pero cuando el Palacio de La Moneda fue bombardeado y con su séquito en completa derrota, el general Javier Palacios entró al despacho y vio al derrocado mandatario socio listo con el revólver en la sien y completamente agujereado.
  Para entonces, varios miembritos de las Fuerzas Armadas, ya estaban decididos a realizar un cruento golpe de estado, liderado por Gustavo Leigh (Comandante en Jefe de la FACH) y José Toribio Merino (Vicealmirante de la Armada), que además contaban con el apoyo de la CIA y del presi yanqui Richard Nixon. Para asegurar el éxito del ataque, solo faltaba que Augusto José Ramón se "ascurriera". Sin embargo, pese a la solicitud del Checho Arellano, tres días antes del golpe él no se pronunció, el 9 se le vio con Allende y otros generales anunciando un plebiscito por la situación de mierda en que estaba Chilito..., pero después de ese intento frustrado, Augusto José Ramón finalmente se unió a los golpistas.
  Tras el asalto y golpe militar, varios francotiradores terminaron aplastados en plena calle y llevados a centros de torturas, como el Estadio Chile, Calle Conferencia, Estadio Nacional, Villa Grimaldi, Tres y Cuatro Álamos, Tejas Verdes y los Hornos de Lonquén, entre otros lugares donde para los mayonesos, la palabra MUERTE les empezaba a rondar en sus azoteas.
  De hecho, el régimen duró casi 17 años en el Poder, reconstruyó el país a su antojo y enderezó a los chilenos a punta de sables, macanas, redadas, allanamientos, enfrentamientos armados, masacres, persecuciones, secuestros, torturas, asesinatos a sangre fría, exilio forzado y censuras en los medios de comunicación, aunque también su fama de anticomunista acérrimo lo hizo mandar a matar y hacer desaparecer a miles de chilenurris quienes fueron sus opositores durante ese período. Bajo su tiranía fueron muertos diferentes personajes como Carlos Prats, Sofía Coutbert, Augusto "Mireyo" Olivares, Víctor Jara, Pablo Neruda, Joan Alsina, Orlando Letelier, Tucapel Jiménez, Eduardo Frei Montalva -quizá el único magnicidio que registra la historia-, Rodrigo Rojas Denegri, André Jarlan. José Carrasco Tapia y un sinnúmero de personas. Ganó un ilegítimo Plebiscito en 1978 para legitimar su gobierno, ganó otro Plebiscito ilegítimo en 1980, promulgó entre cuatro paredes la maldita Constitución de 1980 (la de Jaime Guzmán) y perdió otro en 1988, ante un conglomerado de 16 partidos opositores, que sacaron un 54,69%, contra un 43,04% del tata. Al año siguiente, los opositores a su régimen lo obligaron a reformar la Constitución, y ganaron en las Presidenciales.
  Los crímenes más deleznables que se destacan, son la Caravana de la Muerte, la Operación Cóndor, el Caso Quemados, el Caso Degollados y la Operación Albania o Matanza de Corpus Christi, entre otros.
  El cambio de mando de 1990, fue el hecho más significativo en la historia de Chile, mientras Augusto José Ramón seguía guaripoleando el Ejército hasta el 10 de Marzo Monumental de 1998, fecha en que le traspasó el mando a su sucesor Ricky Izurieta. Al día siguiente, asumió como Senador Vitalicio, dejando la mansaca entre los parlamentarios socialistas que armaron mansa ni que bataola en la Cámara Alta. Entonces aquí vienen los momentos más brígidos de Augusto José Ramón, los que parten con la cuática de la supuesta Acusación Constitucional -que el Senado la rechazó-, la partida a Londres con visa diplomática, la entrada a la London Clinic, la orden de captura emanada del juez y ex diputado socialista petazeta Baltasar Garzón, los juicios, Lord Hoffmann, los fallos adversos, los 503 días de arresto, la liberación por causas de salud, el bullado regreso a Chilito lindo, los desafueros que fueron y nunca fueron, los autos de procesamiento, los atados entre partidarios y detractores, los marihuanazos y tráfico de cocaína, casos de corrupción, lavado de dinero, malversación de caudales públicos, cohecho, coimas, tráfico y contrabando de armas y explosivos, el Caso Riggs, el caso CEMA Chile..., y el ataque al cucharón, que lo mandaron derechito al ahora ex Hospital Militar la madrugada del domingo 3 de Diciembre Matador del año 2006.
  Tras ser internado en ese nosocomio, Augusto José Ramón andaba ya con una pata y cuarto en el pijama de madera, ya que tenía a la sazón 91 apios verdes y no le alcanza para seguir vivito y coleando. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así...

"¡MACORINA, ¡POM POM!..., MACORINA ¡PÓNME LA MANO AQUÍ!!. ¡MACORINA ¡POM POM!..., MACORINA ¡PÓNME LA MANO AQUÍ...!!!".




  Siguiendo con la trama, Augusto José Ramón se empezaba a recuperar en la semana, hizo ejercicios y pudo comer todo lo que el matasanos le aforraba. Sin embargo, llegó el montaje de Alejandro Guillier, que juró de abdómen que el tata se hace el enfermo para arrancarse de los jueces, cosa que indignó a los familiares, amigos y simpatizantes, justo cuando este metrosexual estaba grabando para el video "SANTIAGO NO DUERME" de los Guachupé y salía un Viejo Pascuero que venía con el grupo de Lucho Ardilla, Tomás "Chupete de Fierro" Maldonado, Cony Lizama, Pame Paredes, Koke, Darío, y Martín. Todos los montajes de la prensa carrilera hacia el ex milico, ex Vitalicio y ex Presi de la República, comenzaron el mediodía del domingo 10 de Diciembre Matador a pasarle la cuenta.
A las 11:30 de la madrugada, una falla grandota al cucharón lo mandó a la UTI casi listo para la tumba, el edema pulmonar lo agravó más y más, y luego -a las 14:15 horillas-, le llegó la hora fatal de su vida en la Tierra.

¡¡AUGUSTO JOSÉ RAMÓN PINOCHET UGARTE, HA MUERTO...!!!.


La noticia corrió muy rápido en Chile y el mundo entero. Los familiares lloraban su partida, sus adherentes y simpatizantes se lamentaron, pero le agradecen el haber "salvado" a Chilito lindo de caer en la hoguera marxista-leninista. Mientras sus detractores más recalcitrantes, se pusieron a celebrar como si su muerte fuera un triunfo, alegando por sus DERECHOS HUMANOS, esos que le fueron quitados violentamente y por las armas. Lo normal aquí, es que la muerte de Pinochet debiera ser solo un recuerdo de que Chile está partido en dos facciones políticas y sociales irreconciliables, pero no llegar a esos extremos tan canibalescos y prehistóricos que al final, nos tienen como un país de mierda, que tuvo a un tirano que nos hizo mierda a la inmensa mayoría de los chilenos. 
  Consumada la muerte del tata, la polarización llegó a tal extremo, que fachos e izquierdosos se enfrentaron en plena Alameda hasta altas horas de la madrugada. ¿El resultado?. Los carabipacos salieron a poner orden al callo y se llevaron a la rastra a los revoltosos de uno u otro bando.
  De eso se aprovecharon la Gordi y Lagos Weber para ventilar sus odiosidades hacia los Pinochet y la derecha y no otorgarles FUNERALES DE ESTADO, aunque el Protocolo de Cancillería no obliga a otorgarlo. ¿Por qué no lo hicieron?. Porque Augusto José Ramón, a diferencia de los demás, nunca fue elegido democráticamente en el cargo. A esa lista se les sumaron los abogaduchos comunistas Julia Urquieta, Pamela Pereira, Eduardo Contreras, Héctor Salazar, Nelson Caucoto y Hugo Gutiérrez para sacar tribuna en la prensa carrilera que le seguía embolando la perdíz al tata ya muerto.
  En la vereda opuesta, varios simpatizantes intentaron bajar la tricolor, mientras que el resto de los adherentes se las emprendió contra el Gusano Channel y contra los del Tatán Channel, por los desaguizados que metieron contra Augusto José Ramón y su familia. En la Escuela Militar se estaban velando sus restos mortales del susodicho, claro que ante 60 mil pericotes se apareció el Pancho Cuadrado, nieto del asesinado general Carlos Prats, que no tuvo misericordia y escupió el féretro, como acto de total y completo repudio a la persona del susodicho. Con la vergüenza que los pinochetistas pasaron, aparecieron en el mismo entierro los neonazis y el nieto, llamado Augusto Pinochet Molina, que siendo capitán de Ejército, se mandó un polémico discurso antimarxista que trajo cola y que lo terminó dando de baja por weón. Los restos del vejete manitos de sable fueron cremados el miércoles 13 de ese mes, en el Cementerio Parque del Mar de Concón (a 2 kilómetros de la Rotonda de Concón por el Camino Internacional desde Viña) y sus cenizas trasladadas a la parcela Los Boldos, casa de veraneo de la familia Pinochet en la comuna de Santo Domingo
En fin, todo lo que se llame Derechos Humanos, Desafuero, Extradición, fallos, muertos, torturado, cuentas brujildas (Banco Riggs) y otras pelotudeces, finalmente le pasaron la cuenta y lo enviaron al pijama de madera con el fin de que Chilito lindo no siga tan dividido..., aunque veo que las rencillas entre ñurdos y derechistas, no quieren irse. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así...

"¡SE MURIÓ EL ENTERRADOR... (A NADIE LE CABE DUDA). TENGA CUIDADO, SEÑOR... (SI SE ENCUENTRA CON LA VIUDA)...!. ¡¡LOOO-LOOO-LOOO, LOOO-LO-RO-LO-LO-LO... ¡¡LOOOOOOOOOOO...!!!!".