BALNEARIO CORONA

  Chilito lindo, al igual que el resto del globo terráqueo, está sufriendo con los embates del Coronavirus (Covid-19), pues ya llevamos casi un año con los nosocomios infestados de pacientes salpicados por el bicharraco chino que sigue dejando la zorra, sumado a una fuerte dictadura sanitaria impuesta desde la callampa OMS que tiene al ladrón de mierda de Robastián Piraña y a su sarta de mafiosos en La Moneda como sus títeres más directos. Es más, por culpa del bicharraco y del Piraña, que la barra pop perdió la pega por las cuarentenas prolongadas, aparte de perder a sus parientes y, por sobre todo, la dignidad.

  Pero el tema más recurrente, fue una fiestoca clandestina a todo cachete ocurrida en el balneario de Cachagua, en la comuna de Zapallar, en un hecho que a todas luces, dejó boquiabiertos a moros y cristianos, debido a que, una patota de 70 pericos que estudiaban en colegios cuicos ubicados en Vitacura, Las Condes y Lo Barnechea, la gran mayoría, hijitos de políticos fascistas de mierda, de pacos, de ratis, de milicos y de empresarios de dudosa reputación, se pasaron por el orificio las manoseadas normas sanitarias. Ese grupete de 70 sacoweas irresponsables, emprendieron la fuga desde Chago City por la Panamericana Norte, se pasaron los dos túneles (La Calavera y El Melón), arrendaron flor de casandra en el exclusivo balneario costero y, empezaron el webeo en plena pandemia, sin mascarillas, sin alcohol gel, sin distanciamiento y sin hacerse el PCR por si el bicharraco se les aparecía.

  Resulta que, la patota de angelitos pasados a excremento, eran partidarios del cagado mental de José Antonio Kast y del mal llamado Partido Republicano, más otro lote de Evopoli. Estudiaban en los colegios Everest, San Benito, Verbo Divino, Huelén, Tabancura y Monte Tabor. Es ahí donde el primo del Pancho Correa armó el festín, llamó al Pablo Insulza y éste llamó al resto de los pánfilos que se fueron a gozar de lo lindo en pleno Año Nuevo a la playita, sin saber que por culpa del Covid no pueden hacer carretes con alta concurrencia y con la música a todo chancho.

  Todo iba bien en el condominio con los 70 orangutanes y el DJ, pero aquí entra el tema de los privilegios de estos pelotudos, donde por el hecho de pertenecer a un cochino sector, se creen tan importantes que ya da asco. Pero como el riesgo tiene su precio, tras el carrete a todo chancho que hicieron estos 70 irresponsables de mierda, comenzaría el calvario que ellos mismos se buscaron en la misma casandra del primito de Pablito Insulza, en el sector de Aguas Claras, donde se encuentra el condominio donde estos pelafustanes armaron el mambo hasta altas horas de la madrugada, copeteados, drogados y sin mascarilla. Sí, porque según un audio de WhatsApp, el perla contagió con Coronavirus al Vitoko Besa, al Bozzala y su tropa, a la Mane Fernández con el pololo y su parentela, al Andrés Faúl, al Pancho Correa, a la Isidora Reinecke, a la Tere Tagle, a la María José Escobar, a los dos hijitos de la diputada de Renovación Nació Mal (y evasora del pago de matrículas de sus hijitos) Ximena "Reguleque" Ossandón, a un hijito de un empleado de Canal 13, al mismo Pablito Insulza y a otros irresponsables más, los cuales se agarraron flor de cuarentena y no podrán regresar a Chago City hasta que se hagan la PCR y queden sanitos, porque de conciencia, no tienen nada. Ah, y si eso pasaba en el condominio, a las horas siguientes otro grupete de estos mismos desadaptados sociales hicieron "misa clandestina" (música electrónica), se "dieron la paz" (acto sexual en plena jarana) y terminaron en patota con el respirador en la tarasca y hediondos a Coronavirus por giles. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así...

 ¡¡MACORINA POM POM..., MACORINA PÓNME LA MANO AQUÍ.!!.¡¡MACORINA POM POM..., MACORINA PÓNME LA MANO AQUÍ...!!".

  Los audios han delatado a sus protagonistas, los cuales descartucharon todo lo que pasaba en este "balneario corona", para después desahogarse con tutti vía Twitter y vía WhatsApp. El más funado fue el Pablito Insulza, que fue chupeteado sin anestesia por ser el causante directo de contagiar a sus compipas. El perla cacareó en uno de sus audios, que mientras andaba haciéndose el lindorfo en Cachagua, se comió tres minocas al pil pil. ¡¡Saaaaa...!!!. Ah, y una de las protagonistas en otro audio, terminó haciendo pucheritos para después pelar al Insulza porque éste no la pescaba ni en bajada, sin saber que fue la Isidora Reinecke la que se comió al Insulza, supuestamente primos. ¡¡Qué taaal...!!!.

  Este hecho, fue bautizado como el Cachagua Gate, que destapó de una la irresponsabilidades más cochinas y mugrientas del facherío enquistado en una patota de cuicos egoístas y chupavergas, hijitos de políticos que, aprovechándose de la pandemia y de su casta social y política de mierda, dejaron la zorra en Zapallar, comuna que este lunes bajó a Fase 2 (Transición) por culpa de toda esta patota que se fue a carretear sin medir las consecuencias. Es más, una vecina del condominio los funó al toque, saltaron los maricuecas del Jorge Martínez (Intendente designado de Valparaíso) y del Francisco "El Maraco" Álvarez (Seremi de Salud Región de Valparaíso) para mandar las querellas respectivas con sus amigotes fiscales, sin saber que sus días están contados para que la gallá los eche a patadas en las urnas, principalmente al pinochetista de Martínez. En ese contexto, la querella recae en el corredor de rally Samuel Israel, en los organizadores de esta aberración de parranda..., y en Pablito Insunza.

  Y por si fuera poco, el Cachagua Gate terminaría dando la vuelta al mundo (Amazon ya pidió los derechos para la segunda parte de "La Jauría"), dejando a todo el globo terráqueo con el hocico más abierto que el de la Paty Maldonado. Y el coro monumental lo canta así, así, así, así, así...

 "¡QUE SE MUERAN LOS FEOS..., QUE SE MUERAN LOS FEOS... ¡QUE SE MUERAN TODITOS, TODITOS, TODITOS, TODITOS LOS FEOS QUE SE MUERAN...!!".